Una cultura alternativa al ideal de presentar tu libro hasta que esté terminado es la de reconocer y compartir tu proceso de inspiración y escritura, para después, establecer vínculos más profundos con tus lectores. Te dejamos 10 maneras de hacerlo:
1. Comparte tu voz, no la busques
Si a todos los escritores se les impone que busquen su voz antes de exponerse y presentar sus escritos, tú no pierdas tiempo buscándola, utiliza la que ya tienes y comparte lo que amas. Mientras compartes lo que te apasiona esa voz te seguirá hasta encontrarte.
2. Piensa en el proceso y no sólo en el producto
Normalmente nos enseñan a ser egoístas con nuestro proceso creativo. Lo vemos como una fórmula secreta de nuestro éxito y que se debe guardar bajo llave para jamás mostrarlo. Encerramos nuestras ideas y esperamos a que algo magnífico salga de toda esa acumulación de trabajo. Y es hasta entonces que lo compartimos.
Pero los seres humanos están interesados ??en otros seres humanos y en lo que producen. Al compartir nuestro proceso, tenemos en cuenta la posibilidad de que los lectores que tienen una conexión permanente con nosotros y nuestro trabajo, nos ayuden a avanzar más en nuestro producto e incluso a sentirse parte de él.
3. Comparte algo pequeño, todos los días.
Una vez al día, después de haber escrito tu cuota de palabras, encuentra un fragmento de tu producto que quieras compartir. No necesariamente algo de tu manuscrito, puede ser una fotografía o un video de algo que te inspiró a escribir tu próximo capítulo. Puedes considerar un proceso o una técnica que te haya ayudado para atraer la inspiración o una reflexión de lo que aprendiste.
Cuando compartes algo pequeño todos los días no necesitarás de mucho tiempo y podrás ajustar las publicaciones en el transcurso del día, mientras almuerzas o mientras pasan los comerciales durante tu programa favorito de televisión.
4. Comparte tus influencias
Si tienes pena de compartir algo pequeño y propio, puedes compartir tus gustos por la literatura, el cine, el arte o la comida. Los temas pueden ser variados y no debes encerrarte sólo en libros, los escritores somos más que eso.
Lanza respuestas en tu blog y en redes sociales a estas preguntas ¿De dónde sacas la inspiración? ¿Qué tipo de cosas flotan por tu cabeza? ¿Qué lees? ¿Está suscrito a algún canal de YouTube? ¿Qué sitios visitas en Internet? ¿Qué música te gusta escuchar? ¿Qué películas te movieron el alma? ¿Qué coleccionas? ¿Qué hay dentro de tu libro? ¿Quiénes son los profesionales que admiras en tu campo?
5. Cuenta una buena historia
Deja a un lado la idea trillada de que “mi trabajo habla por sí mismo”, los lectores quieren saber de dónde vienen las cosas, cómo se hicieron y quién las hizo. Las historias que cuentas sobre tus manuscritos y presentaciones de libros influencian a las personas y hacen que comprendan mejor tu trabajo y sobre todo tu esfuerzo. Tus fatigas y derrotas, así como los momentos exitosos y de felicidad.
Todo el mundo ama a una buena historia, pero una buena historia no la pueden hacer todos. Es una habilidad que requiere toda una vida para dominarlo.
6. Enseña lo que sabes
Cuando aprendes algo, enséñaselo a los demás. Comparte tu lista de lecturas y apunta los materiales y útiles que necesitaste para aprender. Elabora tutoriales y publícalos en tu blog o en un post con explicaciones paso a paso. Cuando ayudas al resto a aprender, las ayudas a sentirse mejor.
Enseñar a las personas lo que aprendes le agrega valor a lo que haces y añade más interés hacia tu trabajo porque se acercarán a ti.
7. No seas spam
Si eres de esos escritores que se la pasa publicando información, reseñas, precios y enlaces de tus propios títulos, lo estás haciendo mal. Aquellos que buscan fans, reconocen a otros fans. Calla y escucha de vez en cuando a otros escritores, músicos, fotógrafos, periodistas que sean afines a tus gustos y comparte sobre ellos.
Consigue seguidores porque eres de esas personas dignas de seguir. No pierdas el tiempo de los lectores y no lances esa incómoda frase “sígueme de vuelta” en ninguno de tus perfiles. Es lo más triste que existe en Internet y en las promociones.
8. Prepárate
Cuando expongas tu título al mundo debes prepararte para lo bueno, lo malo y lo feo. Mientras más lectores te sigan, más críticas recibirás. Aprende a ser golpeado y deja que las personas opinen, no borres sus comentarios si los pones en línea, ni respondas con el mismo tono. Aprende a ser cortés en tus respuestas o sólo a recibir retroalimentación y sigue publicando.
9. Traiciona
La palabra traición es muy fuerte y la mayoría de escritores la utilizan para insultar a otros cuando dicen que éstos se han vendido. Sin embargo, una vida de creatividad tiene que ver con el cambio de movimiento hacia adelante, tomar riesgos, la exploración de nuevas fronteras.
Sé ambicioso y mantente ocupado. Piensa en grande. Amplía tu audiencia y no justifiques tu pasión bajo la idea de que quieres mantenerte “real” o de “no me vendo”. Prueba cosas nuevas y si la oportunidad se viene podrás hacer la clase de trabajo que quieres hacer.
10. Quédate
Toda carrera está llena de altos y bajos en especial cuando estar entre vivir tu vida y hacer lo que te gusta como oficio. Es muy importante no tirar la toalla antes de tiempo pues las personas que obtienen lo que buscan lo hacen luego de una larga espera.
No se puede planear nada; sólo se puede trabajar. No se puede contar con el éxito; sólo se puede dejar abierta la posibilidad de que llegue, y estar listo para subir y tomar el paseo a la hora adecuada.
Fuente: Austin Kleon